Menudo favor le hacen al Presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Juan Díaz de la Torre.
La negociación única nacional, lejos de mermar al líder, le ha fortalecido. ¿Por qué? Aquí dos breves razones:
1.- Eliminada la doble negociación, nadie más tiene la legitimidad para expresar la voz del magisterio, que el Comité Ejecutivo Nacional del SNTE que comanda Juan Díaz de la Torre.
Esto significa que, las secciones sindicales de los estados, llevaron sus “dolencias laborales” al líder para que éste las anexara al pliego general de demandas, es decir, ningún Gobernador (excepto Gabino Cué), tendrá que sentarse a negociar salarios con los líderes sindicales.
He ahí el detalle. Que se preocupen los maestros adheridos a los diversos sindicatos independientes que, cansados de los vicios con que se Gobierna el SNTE, se separaron de ese organismo sindical, pues prácticamente no tendrán una mesa de negociación salarial.
2.- Hay una pasmosa telenovela donde los actores principales son el titular de la SEP, Emilio Chuayffet Chemor, los Gobernadores de los Estados y, claro, el líder del SNTE, Juan Díaz de la Torre.
Hay que notar el rimbombe con que se anunció el fin de la negociación salarial 2014, la primera bajo la modalidad de mesa única nacional SEP-SNTE.
Tanto mediatismo no solo oxigena al Gobierno del Enrique Peña Nieto, sino también el liderazgo de Juan Díaz, que poco a poco, empieza salvar del naufragio político su cuestionada figura tras la caída de su antecesora, Elba Esther Gordillo Morales.
Me parece pues que el líder del SNTE sale avante y con buenos dividendos, pese al raquítico 3.5 % de aumento directo al salario de los trabajadores, cifra menor al 3.9 % obtenida en 2013.