Profesores y estudiantes nos vimos en la necesidad de alejarnos de las aulas a causa del COVID-19, orillando a una comunicación interactiva siendo el principal medio las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC). La plataforma educativa gratuita de Google Classroom, permitiría la conexión a distancia de manera fácil, ordenada y permitiría compartir información, así como crear tareas. Herramienta que hasta el momento no ha solucionado la comunicación de ambos actores, en primer lugar, la saturación de la red y capacitación.
Hoy en día tanto docentes y alumnos estamos usando múltiples recursos en línea dado que las escuelas están cerradas ante la contingencia, dejando a un lado la calidad educativa con el fin de cumplir con las tareas asignadas. Aunado a lo anterior se tienen que buscar estrategias didácticas que logren metas previstas e imprevistas en el proceso de enseñanza aprendizaje y no solo dejar una cantidad excesiva de actividades que solo estresen a los alumnos, padres de familia y por lo tanto estaríamos cayendo en un error.
Los docentes nos vemos más comprometidos en motivar la construcción de aprendizajes significativos en los jóvenes por lo tanto la estrategia didáctica deberá definir el método, la técnica y las actividades por los cuales el docente organiza las acciones de manera consciente para construir y lograr metas. La finalidad del método didáctico es lograr el aprendizaje significativo y el desarrollo de competencias para obtener soluciones pertinentes, creativas e innovadoras. (Morales, sf)
La técnica didáctica se concibe como el conjunto de actividades que el maestro estructura para que el alumno construya el conocimiento, lo transforme, lo problematice, y lo evalué; además de participar junto con el alumno en la recuperación de su propio proceso.
El reto al que me enfrento como docente es seleccionar la estrategia didáctica que incluya la programación neurolingüística (PNL), los saberes previos y condiciones socioeconómicas de mis alumnos para lograr un aprendizaje significativo.
