La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) dio a conocer un plan de acción en oposición a la iniciativa de reforma de la Ley del ISSSTE 2025.
Como parte de este plan, la CNTE llevará a cabo un paro nacional de 72 horas los días 19, 20 y 21 de marzo en la Ciudad de México.
Durante la Asamblea Nacional celebrada en el Auditorio “Maestro Agustín Ascención Vázquez” de la Sección 9 en la Ciudad de México, estuvieron presentes los dirigentes de diversas secciones, como Isael González de la sección 7 (Chiapas), Pedro Hernández de la sección 9 (Ciudad de México), Yenni Pérez de la sección 22 (Oaxaca), Eva Hinojosa de la sección 18 (Michoacán), Elvira Veleces de la sección 14 (Guerrero) y Filiberto Frausto de la sección 34 (Zacatecas).
En una reunión, la Coordinadora acordó unirse no solo como magisterio, sino también con otros sectores de derechohabientes del ISSSTE, con el fin de movilizarse de manera conjunta.
La CNTE señaló que la propuesta de reforma no aborda ninguna de las demandas que ha planteado en administraciones anteriores, como el retorno al sistema solidario, la integración de pensiones sin Afore ni UMA, y la jubilación por años de servicio.
En cuanto a las acciones inmediatas, la CNTE anunció que comenzarán con un paro de 48 horas, que iniciará este 6 de marzo con movilizaciones a nivel estatal y continuará el 7 de marzo con una movilización nacional.
Posteriormente, realizarán el paro de 72 horas los días 19, 20 y 21 de marzo en la Ciudad de México. Además, el 22 de marzo se llevará a cabo la próxima Asamblea Nacional Representativa.
Entre los acuerdos alcanzados durante la Asamblea, la CNTE acordó reconstruir su pliego nacional para presentarlo en las mesas nacionales de negociación.
Así también solicitaron que la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo reciba a los representantes de la Coordinadora el 7 de marzo.
Además se informó que emitirán un desplegado y un manifiesto nacional en contra de la reforma educativa, la política educativa y la reforma del nivel medio superior y superior.
Del mismo modo expresó su total rechazo a los foros convocados por la Secretaría de Educación Pública sobre de un nuevo modelo educativo.
La CNTE se declaró en alerta máxima y en sesión permanente en sus espacios de la Comisión Nacional Jurídica y Derechos Humanos, la Dirección Política Nacional y la Asamblea Nacional Representativa, con el objetivo de lograr un paro indefinido a nivel nacional.
La disidencia magisterial reconoció que, aunque muchos de los contingentes que se han manifestado en contra de políticas del actual gobierno pertenecen al sindicato oficialista, conocido como “charro”, el movimiento se forja desde las bases y no desde los líderes.
Por último, la CNTE anunció que emitirá una declaración política en contra del líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y Senador de Morena, Alfonso Céspedes Salas, a quien consideran el principal enemigo del magisterio nacional.
