Veracruz y la guía de la 7ª sesión de CTE

No hay duda que algo aún peor que una oposición trasnochada, son los funcionarios que deben su cargo al efecto AMLO y se han convertido en todo lo que ...
Image

“El poder no cambia a las personas, sólo revela lo que verdaderamente son”

José Mújica

I. La guía de la 7ª sesión de CTE ciclo 2020-20211

Aparentemente, el Secretario de Educación de Veracruz no ha aplicado las estrategias de respiración que sugiere la guía de la séptima sesión de Consejo Técnico Escolar frente a las adversidades propias de los tiempos que corren.

En el Apartado I. Continuemos trabajando con las emociones, específicamente en la página 14, se invita a los docentes a pensar antes de actuar, a no permitir que las emociones nos jueguen malas pasadas a la hora de tomar decisiones.

Aparentemente, nuestras autoridades no han hecho uso de estos recursos aryuvédicos, pues la noche del lunes 17 de mayo de 2021, 14 maestros del SDTEV que se encontraban protestando en la Secretaría de Educación de Veracruz y la avenida Lázaro Cárdenas en la ciudad de Xalapa, Veracruz2, fueron detenidos y llevados a prisión aproximadamente a las 9 de la noche, donde permanecieron durante 7 horas, después de que el Secretario de Educación acudió personalmente a exigir su liberación (¿?)

Existe, sin embargo, la posibilidad de que el Secretario de Educación tomara la decisión de acudir al rescate de los compañeros maestros después de observar el vídeo Carola y Agustín: ¿cómo manejar nuestra ira?, sugerido en la primera parte de la guía de la 7ª sesión del CTE para trabajar la regulación de las emociones y, sobre todo, recordar quién es, de dónde vino y en qué lugar los colocará la historia a él y al actual gobernador de Veracruz.

Y es que frente al desempeño de la USICAMM, el MEJOREDU, la SEP y las autoridades educativas federal y estatales, la propuesta del manejo de las emociones de la 7ª sesión del CTE es más que pertinente. Qué duda cabe.

II. La terca (y necesaria) memoria magisterial

El desempeño de Cuitláhuac García Jiménez como gobernador de Veracruz, de Zenzayen Escobar García como Secretario de Educación del mismo Estado y de Delfina Gómez Álvarez al frente de la Secretaría de Educación Pública, demuestran fehacientemente que un docente no necesariamente es un buen funcionario o un político que, en el imaginario gremial, comprende sus necesidades y hace lo posible el añejo anhelo de justicia, precisamente por tener un origen común: las bases magisteriales

Más bien, en los hechos han evidenciado una enorme habilidad para capitalizar la justa indignación magisterial a favor de su agenda y en contra de las causas y personas que decían defender, de los mismos docentes que utilizaron como estandarte para legitimar formas de protesta que incluyeron en su momento la toma de puentes, casetas y carreteras, en uso constitucional del derecho a la manifestación.

No hay duda que algo aún peor que una oposición trasnochada, son los funcionarios que deben su cargo al efecto AMLO y se han convertido en todo lo que juraron combatir, pero con el plus del bono democrático que los llevó al poder.

Y es que las formas de protesta magisterial desde 2013, que incluían la provocación y el enfrentamiento directo contra la fuerza pública y el establishment político, apuntalaron un tipo de narrativa que construyó alrededor de figuras como Cuitláhuac García Jiménez la categoría de “líder social” y gobernador de Veracruz para el periodo 2018-2024

En ese entonces, los maestros que no compartieron este tipo de estrategias basadas en la estridencia y la provocación para luego acusar represión, fueron marginados y señalados de “enemigos” de las “causas justas” que la “disidencia legítima” decía defender, sin pensar que unos años en el poder los llevarían a demostrar que el verdadero enemigo venía desde adentro, camuflado en profesor esforzado y solidario, que lucha por mejores condiciones de vida y salario para él y sus compañeros docentes.

A los maestros que buscaron diálogos alternos con la autoridad -porque al final del día toda confrontación debe terminar en eso, en un diálogo que busque nuevas formas de negociación y organización para todos los involucrados-, no solamente los marginaron, sino que fueron señalados de transar con el represor y estar a favor del maltrato al resto de los compañeros. Es decir, Paradójicamente, la disidencia no aceptaba disidentes de su propia línea de acción. Desde ahí, el augurio era pésimo: maestros contra maestros, a favor de la agenda político-electoral de los líderes de el movimiento.

Por eso, una de las grandes lecciones que la llegada al poder de la disidencia magisterial -lo que sea que signifique- deja a los maestros veracruzanos es que no debemos permitir que la inconformidad y el reclamo docente sean secuestrados por ningún líder o movimiento “justiciero” que ayude a encumbrar a quienes son incapaces de diferenciar entre la política y la grilla o la crítica y el ataque. Que el trabajo a favor de nuestros alumnos, desde nuestras aulas, hable y defienda a cada trabajador de la educación en este país.

III. La (otra) disidencia de la disidencia

Quienes hoy gobiernan (es un decir) Veracruz, no llegaron solos. Los maestros que se apropiaron del término “disidente” y lo defendieron como parte de su alianza con García Jiménez y fueron parte indispensable de su arribo al poder, hoy parecen haber perdido los bríos de antaño para denunciar las arbitrariedades del actual gobernador de Veracruz.

Tal vez -sólo tal vez- hayan comprendido que los docentes de nuevo ingreso de las comunidades más pobres del Estado son los verdaderos disidentes de esta historia, porque no hay acto más revolucionario que ser pobre, tener la oportunidad de estudiar y regresar a su tierra a devolver una parte de esperanza (verdadera, no electoral) a los niños de su comunidad.

Pero eso no lo podemos saber porque no hemos visto el menor atisbo de autocrítica en las imágenes que tuitean desde sus redes sociales para denunciar los hechos en contra de compañeros maestros que protestaban en la Secretaría de Educación de Veracruz la noche del 17 de mayo de 2021, aunque no son los únicos. Los académicos e intelectuales que también apuntalaron sus propias posiciones de poder a costa de la justa indignación magisterial, han hecho mutis. Qué raro ¿no?

¿Usted qué opina, estimado lector?


1  https://educacionbasica.sep.gob.mx/consejos_tecnicos_escolares/default/pub?id=1178&nomactividad=Séptima+Sesión+Ordinaria

2  https://www.alcalorpolitico.com/informacion/liberan-a-docentes-y-a-lider-detenidos-por-bloquear-avenida-en-xalapa-344171.html#.YKP9ZS1t9bU

TEMÁTICAS: