De pronto sus incondicionales desaparecieron. Así también la férrea defensa de la escuela pública.
Sin duda, quienes en los tiempos felices rodeaban a la Maestra, con la pleitesía merecida, han entendido que no hay mucho que agregar a su defensa. Incluso entienden la importancia de alinearse a los dictados del Gobierno Federal.
Es que según el diario reforma, la administración de Peña Nieto tiene en su poder expedientes comprometedores de los líderes seccionales.
Expedientes que podría jugar en su contra si en determinado momento hubieran recurrido al recurso de la movilización masiva de maestros.
La captura de la Maestra solo ha motivado a que el SNTE emita un comunicado donde pide un juicio justo y con respeto a los derechos humanos de su ex lideresa, pero no alega nada para defenderla.
En ese mismo tenor se expresó el PANAL. Con sutileza y cuidando las formas para marcar una delgada línea entre su fundadora y sus muy particulares intereses como partido.
Así se resuelven estas cosas en política.
Que a la Maestra le espera un duro proceso en la cárcel no cabe dudas. Lo triste es que tendrá que hacerlo sola, sin sus incondicionales, sin la pleitesía y comprobando además que era diametralmente falso aquello de que “nadie es más amado por los suyos que yo”