El regreso de Elba Esther Gordillo Morales a la dirigencia nacional del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE) es inminente.
De acuerdo con El Universal, ‘La Maestra’ sólo espera el fallo del Tribunal Superior de Justicia Administrativa, mismo que anticipan sería a favor de que se reanude el Congreso Nacional del magisterio de 2013, el cual reconoce al Gordillo Morales como dirigente del Sindicato.
Dicho falló podría ocurrir antes del mes de noviembre, y si todo ocurre como espera la corriente ‘elbista’, Gordillo Morales será la presidenta legal y constituida del SNTE, y estará en condiciones para convocar a Congreso y nombrar a un sustituto, en este caso al maestro Moisés Jiménez, uno de los operadores de las redes progresistas de Andrés Manuel López Obrador y hombre cercano a ‘La Maestra’.
Y es que según las fuentes consultadas por El Universal, el Congreso convocado por Juan Díaz de la Torre, no tiene validez, por lo que debe reanudarse el de 2013.
Si esto ocurre, Elba Esther regresará a la Presidencia del SNTE y Juan Díaz de la Torre sería secretario general en virtud que era el cargo que el actual líder del Sindicato ocupaba antes de la captura de ‘La Maestra’.
-Presionan a Juan Díaz para que no deje el poder.
Cabe señalar que según la cúpula ‘elbistas’, “las gestiones (para el regreso de Elba Esther) tienen en Juan Díaz un interlocutor muy complejo”.
Y aunque advierten que el consenso para reinstalar a Elba Esther en el máximo cargo del SNTE va caminando, reconocieron que “los intereses del mismo grupo de Díaz de la Torre lo están presionando muchísimo para no dejar el poder”.
Sin embargo advierten dos escenarios para Díaz de la Torre: que en efecto regrese a la Secretaría General del SNTE, o que se vaya debido al amplio rechazo que tiene entre la base magisterial.
En ese sentido estiman que en el sindicato los consejeros voten a favor de la propuesta de Gordillo Morales en la figura de Moisés Jiménez, y que a partir de ello, caminar junto al gobierno de Andrés Manuel López Obrador para concretar uno de los objetivos que une al magisterio: la derogación de la reforma educativa.