La Secretaría de Educación Pública (SEP), perfila la publicación de un nuevo acuerdo para evaluar los aprendizajes en educación básica.
Lo anterior en el marco de la nueva propuesta educativa del Plan de Estudios 2022.
Y es que será en la primera sesión ordinaria del Consejo Técnico Escolar 2023-2024, del próximo 29 de septiembre, cuando los colectivos docente conozcan y analicen el nuevo acuerdo por el que se establecen las normas generales para la evaluación, acreditación, promoción, regularización y certificación de las alumnas y los alumnos de la educación preescolar, primaria y secundaria.
Del mismo modo se presentará la agenda temática de cada una de las sesiones ordinarias del Consejo Técnico Escolar y el Taller Intensivo de Formación Continua para Docentes a lo largo del ciclo escolar.
A dos semanas del regreso a clases en la escuelas del País, maestras y maestros de educación básica enfrentan el reto de implementar el nuevo Plan de Estudios 2022.
Entre las dificultades principales que encuentran los docentes frente a grupo, es el cambio radical que significa el trabajo pedagógico con los nuevos libros de texto gratuitos, los cuales continúan en el centro del debate educativo.
Así también permean las dudas sobre la forma de evaluar los aprendizajes de los estudiantes de educación básica, ya que la nueva propuesta educativa se sustenta en un currículo con campos formativos, lo cual implica el desplazamiento de la educación basada en asignaturas.
De acuerdo con el Plan de Estudios 2022, la SEP propone dos momentos en la evaluación de los estudiantes.
El primero refiere a la evaluación formativa, la cual se centra en el seguimiento que realicen las profesoras y profesores del proceso de aprendizaje de las y los estudiantes, esto es, del desarrollo de éstos en diferentes contextos y experiencias que conciernen a su vida cotidiana.
“Un aspecto central de la evaluación formativa es trabajar con el error de las y los estudiantes en una estrategia didáctica para interpretar el sentido del error y acordar una estrategia de acción. No se trata de contabilizar las tareas que entregó la o el estudiante, el número de sus asistencias, el porcentaje de requisitos que cubrió, ni el número de exámenes que aprobó; más bien, se trata de juzgar si lo que hizo el estudiante está bien o no a partir de la comprensión de lo que no se ha hecho”, señala el Plan de Estudios 2022.
Y el segundo momento refiere a la acreditación que tiene como función sustentar el otorgamiento tanto de calificaciones como de certificados de acuerdo con el juicio que hagan maestras y maestros de todo el proceso de enseñanza y aprendizaje, así como de las condiciones en las que las y los estudiantes hayan avanzado en éste.
“La calificación se construye con la interpretación que las y los docentes y, en su caso, las y los estudiantes puedan hacer de una serie de evidencias que se logran materializar en exámenes, entrega de trabajos, tareas que se solicitan, cuestiones que incluso se pueden agrupar en un portafolio de evidencias para determinar la asignación de un número/calificación que requiere el sistema educativo. La función de esta calificación es un acto que permite determinar la promoción del estudiante, pero no el proceso de aprendizaje obtenido”, puntualiza el Plan de Estudios 2022.
