EL SECRETARIO de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán, culpó al «huachicol educativo» como uno de los factores del estancamiento de los aprendizajes de los alumnos según resultados de prueba PISA 2018.
“(Hemos vivido) lo que llamamos el huachicol educativo, por lo que los recursos, las plazas y el presupuesto tienen que transparentarse para que marche de manera ordenada el sector educativo”.
Señalamientos más, señalamientos menos, el Señor Secretario debe tener en cuenta aquello de que «con la vara que mides te medirán».
Y es que a pesar de que el Presidente López Obrador ha tronado una y otra vez contra organismos internacionales por supuestamente imponer políticas (entre ellas la educativa) a nuestro País, la relación 4T-OCDE va para largo, ya que el mismo Esteban Moctezuma dijo que los resultados de la prueba PISA 2018 serán insumo para la toma de decisiones.
“Ver los resultados (de PISA) como un insumo que tenemos que explorar para que podamos tomar decisiones en base en ello».
Hay que asumir que el Secretario de Educación sabe lo dice porque el tiempo se encargará de que rinda cuentas cuando la OCDE, de nuevo, mida los aprendizajes de los jóvenes de 15 años y ubique a México en el terreno educativo del mundo.
Ojalá que para ese entonces el «huachicol educativo» ya no sea causa del estancamiento de los aprendizajes.
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VAYA MEMORIA que se cargan los dirigentes del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE), principalmente Alfonso Cepeda Salas.
Antes porristas desmedidos de la reforma educativa de Enrique Peña Nieto y aliancistas de la candidatura de José Antonio Meade; hoy feligreses recalcitrantes de la ‘Cuarta Transformación’.
Y es que cómo entender que Cepeda Salas como cabeza del SNTE, agradezca al Presidente López Obrador que haya abrogado «las leyes que tanto daño nos hicieron» (osea, la reforma educativa de EPN), cuando fueron ellos quienes con tanto ahínco respaldaron e incluso ayudaron a implementar.
¡En serio que no se miden!
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HABLANDO DE desmemoriados, ‘Maestros por México’. Esta organización afín a Elba Esther Gordillo lleva días, meses, «luchando» por la democracia sindical.
Llama la atención que sean esos personajes que tanto se orinaron en la democracia sindical quienes hoy encabecen el ánimo democratizador en el SNTE que sí desean los maestros.
Tampoco se miden. Miren que hay que ser desvergonzados para impulsar por la vía el voto libre, secreto y universal de los maestros, el regreso de Elba Esther a la dirigencia del SNTE, mujer que durante sus 23 años al frente del Sindicato, hizo todo lo humanamente posible para negar al magisterio la posibilidad de votar en las urnas para elegir a sus dirigentes.
