Hace unos días las Comisiones Unidas de Educación y Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados convocaron a maestros, especialistas, sociedad civil, familias, estudiantes, y autoridades a participar en audiencias públicas para presentar propuestas que fortalezcan la iniciativa de reforma al artículo 3ºconstitucional.
El objetivo de este ejercicio, suponemos, es acercarnos a la mejor versión de dicho artículo.
La educación no es un servicio; es un derecho humano, y el artículo 3º sienta las bases de lo que podemos exigir al Estado para el ejercicio pleno de este derecho.
En Mexicanos Primero tomamos en serio la garantía que nos otorga la Constitución de nuestro país y por medio de Aprender Primero, nuestro brazo jurídico, hemos impulsado litigios estratégicos en defensa del derecho a la educación de todas las niñas, niños y jóvenes.
A Citlali, una niña mazahua, se le negó el acceso a la escuela de su comunidad por tener síndrome de Down. En una suspensión definitiva, el juez ordenó que la dejaran inscribirse y se asignara a la escuela un maestro con experiencia y formación en inclusión de estudiantes con discapacidad.
Esta orden judicial va más allá del “acceso” y busca asegurar la verdadera inclusión de Citlali, así como otros niños que experimentan barreras para el aprendizaje.
En una Comunidad de Tratamiento para Adolescentes en la Ciudad de México, los jóvenes en reclusión sólo reciben atención educativa una hora al día, con libros de texto que datan de hace una década y sin contar con maestros especializados.
En este caso, el juez ordenó no sólo que se imparta a los adolescentes el mismo número de horas de clase que recibirían fuera, sino que sea con docentes especialistas y una colección completa de materiales educativos.
A pesar de tener más de 100 alumnos, una secundaria en Guerrero se encontraba en condiciones deplorables de infraestructura. Junto con la comunidad se presentó una acción colectiva por la violación constitucional de no proveer infraestructura adecuada para el aprendizaje. Las autoridades federales y estatales reaccionaron y construyeron cinco aulas, una plaza cívica y sanitarios dignos.
Estos casos buscan hacer efectivo el derecho de tod@s no sólo a “recibir” una educación, sino también a aprender y participar en ella. Hoy en día este derecho está en riesgo. La iniciativa de reforma al artículo 3º propone eliminar la obligación del Estado de garantizar el aprendizaje. Si se aprueba tal como está, ni Citlali, ni los adolescentes, ni la comunidad de Guerrero tendrían la base para demandar que el Estado asegure lo que necesitan para desarrollarse en la escuela.
Las discusiones en San Lázarorepresentan una oportunidad para avanzar hacia el artículo 3º que necesitamos.
Pedimos a nuestros legisladores que no eliminen nuestro derecho a aprender y que garanticen que ese aprendizaje sea integral e incluyente.
Artículo publicado en El Heraldo de México.