(Notimex).- El equipo de campaña de la coalición Todos por México advirtió que Andrés Manuel López Obrador promueve una educación “patito” por temor a ciudadanos críticos.
La insistencia de López Obrador de cancelar la reforma educativa sólo puede entenderse a partir de su obsesión por alcanzar y ejercer el poder de forma autoritaria, sin contrapesos ni opiniones críticas; busca que los ciudadanos se sometan a un control corporativo, sacrificando su libertad y su creatividad, alertó.
En contraste, destacó que la visión de país que promueve José Antonio Meade está fundada en generar las condiciones para aprovechar al máximo el talento de los mexicanos a partir de una educación de excelencia y un sistema de ciencia, tecnología e innovación que premie la creatividad y el emprendedurismo.
La coalición Todos por México llamó a no equivocarse y el 1 de julio elegir a José Antonio Meade, el candidato más comprometido con la educación de calidad para las niñas y niños de México.
Afirmó que el modelo educativo vigente se construyó con la participación y las aportaciones de maestros, especialistas, funcionarios, empresarios, padres de familia y organizaciones de la sociedad civil con el objetivo de promover una educación de excelencia para niñas, niños y jóvenes de México.
Echar abajo dicho modelo, como pretende López Obrador, implicaría echar por la borda años de trabajo colectivo y pasar por alto la opinión mayoritaria de la sociedad, que aprueba la implementación de la reforma (63 por ciento ) y de sus principales componentes, como la evaluación docente (76 por ciento).
Agregó que los nuevos planes y programas de estudio, que fueron desarrollados por los principales especialistas de México -y que entrarán en vigor en el ciclo escolar 2018-2019 para prescolar, primero y segundo de primaria y primero de secundaria- contemplan una mayor profundidad en los aprendizajes, la introducción de inglés y habilidades socio-emocionales.
Además espacios de autonomía curricular para que cada comunidad escolar defina una parte de su plan de estudios en función de su propio contexto.
“Se trata de innovaciones curriculares que cuentan con amplia aprobación de la opinión pública (más de 90 por ciento ) y que permitirán construir una ciudadanía libre, autónoma, crítica y capaz de defender sus derechos”.