El Presidente Andrés Manuel López Obrador tronó en contra del bloque conservador que se opone a los nuevos libros de texto de educación básica, a quienes calificó de mentirosos y cretinos.
Durante la conferencia mañanera de este día, el mandatario del País aseguró que continuarán los diálogos circulares para seguir descubriendo las mentiras que se difunden en torno a los nuevos materiales educativos.
“Van a continuar los diálogos circulares sobre los libros de texto porque es muy interesante que se conozca libro por libro, que se conozcan los contenidos, que se vaya poniendo al descubierto lo mentiroso, lo cretino que son los conservadores, cómo son capaces de calumniar, de mentir, todo en función de sus intereses, sus privilegios y también por su ideología conservadora, clasista, racista”, expresó.
El mandatario del País refirió que el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) ya se pronunció a favor de los nuevos libros de texto a través de un comunicado, en donde los calificó de “herramientas fundamentales que afianzan el derecho humano a la educación”.
Libros sin carga ideológica
Así también negó que existan contenidos con carga ideológica, partidista o política; que más bien los ataques a los nuevos libros responden a intereses económicos del bloque conservador.
“Entonces, todo eso es lo que está pasando con relación a los libros. No es que no tengan matemáticas, no es que se vaya a inyectar el virus del comunismo, no es que se les esté enseñando a los niños cuestiones sexuales desde temprana edad; no hay nada de eso. Es el interés económico y el hambre del dinero, que es enfermizo”, expresó López Obrador.
Por último advirtió que hay dos periódicos que recibían recursos millonarios en la elaboración de los libros de texto gratuitos y que hoy están muy enojados porque el Gobierno les quitó el financiamiento.
“Hay dos periódicos que recibían más de mil millones al año, dos periódicos que hacían los libros, entre otros; entonces, esos están lanzadísimos, incluso empresas extranjeras que también financiaban a intelectuales y les daban premios, a veces se los llevaban a España y los condecoraban allá en la corte, la monarquía”.