Este día el Presidente Andrés Manuel López Obrador fue cuestionado sobre la recomendación de la farmacéutica CanSino de que las personas vacunadas con su biológico contra le COVID-19, incluidos los docentes del País, requerirán una segunda dosis a los seis meses de haber recibido la primera.
Durante la conferencia mañanera de este día, el Ejecutivo de la Nación se limitó a decir que hay una política mercantil, y que es natural que las farmacéuticas quiera que se consuman sus vacunas, pero que al final de cuentas, el Gobierno definió una política para proteger a la gente, al tiempo que se cuida el presupuesto.
Puntualizó que se debe actuar con base a fundamentos científicos y no a través de boletines de prensa.
“Como es natural, las farmacéuticas quieren que se consuman más vacunas y nosotros tenemos que adquirir las vacunas que son necesarias y definir una política de protección a la gente, no una política mercantil o comercial. Cada quien tiene su función, las farmacéuticas están en su papel, no es ningún cuestionamiento, pero el gobierno pues también, tiene que cuidar el presupuesto, que es dinero de todos, no se puede desperdiciar y se tiene que actuar a partir de fundamentos científicos, no de declaraciones o de boletines”, dijo el mandatario.
Por su parte, el Subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, señaló que no existe evidencia científica robusta que demuestre que ninguna de las vacunas pierde capacidad de protección contra el COVID-19.
“Hoy no existe evidencia científica publicada, robusta, consistente que demuestre que ninguna de las vacunas contra COVID, contra el virus SARS-CoV-2 pierde su capacidad protectora contra los desenlaces que interesa evitar: la muerte, la hospitalización, la enfermedad grave u otras complicaciones”, señaló el Subsecretario.
Detalló que algunas vacunas tras seis u ocho meses de haberse aplicado, reducen su capacidad máxima de anticuerpos, pero advirtió que eso no significa que han perdido su efecto protector contra el virus.
“Se ha observado en algunas de las vacunas que seis, ocho meses después de aplicadas los anticuerpos reducen con respecto a la cantidad máxima que se logró a las pocas semanas de la inyección, pero, insisto, eso no es una demostración de que han perdido su efecto, es esperable que el sistema inmune pase a un estado de reposo”.
Agregó que actualmente el Gobierno está monitoreando el comportamiento de las vacunas, pero precisó que si aparece evidencia clara y consistente sobre la reducción de la protección de las vacunas, se tomarán las decisiones necesarias al respecto.
“Como ya comentaba el presidente, hasta hoy, 17 de agosto de 2021, seguimos monitoreando y seguiremos monitoreando. Si apareciera evidencia científica, clara, robusta, consistente, que mostrara que se redujera la potencia protectora de las vacunas, eso podría llevar a otra decisión, pero hasta hoy eso no ha ocurrido”.
Cabe señalar que el pasado 8 de agosto, la farmacéutica CanSino BIO difundió un comunicado en el que dio a conocer que luego de estudios recientes, se recomienda una segunda dosis de su vacuna contra el COVID-19 seis meses después de que se aplique la primera dosis.
“Los estudios recientes de CanSino BIO revelan también que el uso de Convidecia™, como refuerzo (o booster) a los seis meses de una primera aplicación, logra que los niveles de anticuerpos neutralizantes se multipliquen por ocho. Es decir, una segunda aplicación de la vacuna CanSino sí brinda mayor protección a quienes la han recibido, y es segura”.
Puntualizó que una segunda dosis de su vacuna logra que los niveles de anticuerpos neutralizantes se multipliquen por ocho.
“Es decir, una segunda aplicación de la vacuna CanSino sí brinda mayor protección a quienes la han recibido, y es segura”.