De nuevo la exlíder del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo Morales lanzó una serie de opiniones sobre el tema educativo y sindical del País.
En entrevista para Grupo Reforma, la también llamada ‘Maestra’, confesó que su regreso a la vida política nacional obedece que tiene firmes convicciones, además de que dijo, es una mujer con congruencia.
“Las convicciones no son motivo de negociación, porque puedo decir que soy una mujer congruente. Si bien es cierto que el Gobierno anterior decidió que había que detenerme, lo cierto es que lo hizo violentando cualquier derecho: derecho humano, derecho ciudadano, derecho político como dirigente. Y fue todo consecuencia de una reforma y de una palabreja o palabrota, depende cómo se quiera ver, que era permanencia”, dijo Gordillo Morales.
En la entrevista fue cuestionada sobre si fue un abuso de su parte mantenerse en el poder sindical del SNTE por casi 25 años, a lo que la exlíder magisterial respondió que más bien fue una necesidad.
“(Fue) una necesidad. Teníamos conflictos verdaderamente serios. El Estado mexicano estaba enfrentado a una situación dramática. Recordará una elección presidencial cuestionada, un magisterio irritado exigiendo democracia y más salarios, salarios de los trabajadores de la educación paupérrimos, condiciones de las escuelas que aún siguen dramáticas, reconocimiento al magisterio nulo, o sea, había en los hechos realidades para una inconformidad de determinados, por no decir de todos los trabajadores, y también una demanda de exigencia de padres, de madres de familia, de la sociedad en su conjunto por mejorar el sistema educativo”.
Y fue más allá, recordó que había además que era necesario su extendido liderazgo sindical porque muchos maestros formaban parte de movimientos ideológicos tanto de derecha extrema o izquierda radical.
“Visiones ideológicas tanto de derecha, radical extrema, como los radicalismos de izquierda. Guerrillas, el EPR, las FARC´s metida en algunas zonas, el EZ, es decir, muchos conflictos que no se veían y no se profundizaban en el análisis mediático y el propio Gobierno no los transparentaba y en ese polvorín estaba yo parada, porque los maestros eran partícipes y actores importantes en todos estos movimientos”, puntualizó.