Nos enteramos que anoche, la Maestra Elba Esther Gordillo en la sesión extraordinaria del Consejo Nacional del SNTE, propuso ante 300 líderes y consejeros del sindicato aprobar un resolutivo para aplazar la evaluación universal y ¿qué creen?, se aprobó.
Según el SNTE la desición fue tomada porque la SEP no informó con oportunidad los mecanismos para la aplicar la evaluación.
Y luego de éste trolleo lamentable ¿qué haremos nosotros los rehenes del SNTE y obreros de la SEP?
No tengo ni la mas remota idea y menos cuando se está en manos de éstos dos titanes de las malas políticas educativas.
Lo que si se confirma es, que las supuestas reformas, acuerdos para elevar la calidad de la educación, compromisos compartidos o como le quieran a bien llamar, no eran más que las canonjías de sexenio.
Pura mentira vil y rastrera.
Nosotros, maestros de piso a quienes el escrutinio social nos ha juzgado como miedosos, incompetentes, culpables, zombies de Elba Esther, grillos u otro colorido adjetivo, nos invade la incertidumbre y lamentamos éste juego político con jiribilla electoral.
Pero en la ley de la “causalidad”, a la SEP le sucede lo razonable cuando se hacen tratos en la niebla. No podía haber otro desenlace.
¿Y el SNTE?, a lo sumo elevará sus bonos antisociales, y más la figura de su cuestionada lideresa a quien, justamente o no, le reservan un lugar privilegiado en la mesa del fracaso educativo.