Nota del editor: el presente texto fue tomado del perfil público de Facebook del Académico Ángel Díaz-Barriga y se reproduce aquí por ser de interés público y magisterial.
De las ternas que el ejecutivo envió al senado de la República para ratificar o en su caso designar a dos integrantes de la Junta de Gobierno del INEE, el senado, aún cuando el presidente del INEE les solicitó que lo ratificaran por un periodo más para poder concluir con el programa y metas que había establecido para su gestión.
Los cambios generan muchas reflexiones.
1. La integración de las ternas que presentó el Ejecutivo, de acuerdo a la propuesta que le hicieron probablemente de la SEP, en vez de estar integradas por especialistas en evaluacion o en docencia estuvieron integradas por el funcionario actual del INEE que concluía su periodo (elegido por haber sido investigador, aunque en los hechos toda la junta directiva renunció a analizar el tema de la evaluación docente desde la investigación educativa, en particular desde la evaluación, la didáctica y la docencia, convirtiéndose en los hechos en “verdugos” de los docentes). Las ternas presentadas por el ejecutivo se integraron por el funcionario del INEE que podría ser reelecto y por funcionarios cercanos a la SEP, pero que son ampliamente desconocidos en el mundo de la evaluación o en el mundo de la academia.
2. El mensaje del Senado es paradojal: el INEE tiene que cambiar, tiene que renovarse, supongo aunque no lo puedo inferir de las designaciones que están pensando que debe MODIFICAR O REALIZAR ADECUACIONES AL SISTEMA DE EVALUACION DEL DESEMPEÑO DOCENTE. La paradoja se encuentra en que al colocar a personas que no manejan el tema de la evaluación y sean cercanos a la SEP actual, en realidad lo que buscan es garantizar que en el siguiente sexenio esta política de evaluación del desempeño se mantenga, pese a lo violento e indigno que resulta para la profesión docente. La pregunta que se abre, ¿la junta directiva del INEE será sensible a la necesidad de cambiar que como mensaje envía el senado?
3. De igual manera llama la atención que el conjunto del senado, quiénes al realizar una designación de cambio, envían la señal de la necesidad de efectuar ese cambio en el INEE, no sean capaces de proponer un proyecto de cambio a la ley del INEE y a la del Servicio Profesional Docente. Por supuesto que muchos de ellos reconocen que la ley es MEJORABLE, que modificar la ley NO SIGNIFICA REGRESAR A LA VENTA DE PLAZAS, pero son conscientes de los errores que tiene la ley. No nos hemos cansado de enunciarlos y de las opciones que existen para mejorarlos. Muchos les podríamos ayudar en la tarea si quieren un proyecto de ajustes y cambios en menos de 48 hs. Pero su TERQUEDAD e INCAPACIDAD de entender los problemas educativos del país, los llevan a negarse a esta opción.
4. Por eso muchos que estamos del lado de respeto a la dignidad de la profesión docente, que asumimos la responsabilidad de realizar una EVALUACIÓN DEL DESEMPEÑO desde el aula que permita una RETROALIMENTACIÓN EN EL TRABAJO DOCENTE, que consideramos que la gran transformación que se espera de nuestro sistema educativo EMPIEZA EN EL AULA, en el trabajo cotidiano que hacen docentes y alumnos, analizaremos con detalle las propuestas de quiénes quieren ocupar la presidencia de la república y votaremos por aquellos que den respuesta a la demanda de docentes, especialistas en didáctica y en evaluación educativa (no administrativa, no basada en la teoría del test) para dar nuestro voto a quien asuma el respeto a la dignidad de la profesión docente.