El diputado Marco Antonio de la Mora Torreblanca (PVEM) busca que se prohíba el uso de teléfonos celulares, inteligentes y otros, por parte de las y los estudiantes durante el horario escolar, en los planteles educativos de nivel básico.
Lo anterior a través de una iniciativa que modifique la Ley General de Educación
Sin embargo establece que no procederá la prohibición cuando el dispositivo sea para uso pedagógico autorizado, por motivos de salud o discapacidad acreditados.
En el documento advierte que los lineamientos que emita la autoridad educativa deberán prohibir el uso de teléfonos celulares, establecer los tres casos de excepción señalados anteriormente, así como criterios de resguardo, apagado, comunicación con familias y protocolos de actuación para el personal docente y directivo.
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El legislador aclara que el propósito de su iniciativa no es limitar el uso de la tecnología en las instituciones educativas; sino que más bien está enfocado en regular el uso de teléfonos celulares durante el horario escolar.
Justificó que ello permite que las alumnas y los alumnos interactúen socialmente, se concentren y busquen alternativas de esparcimiento propias de su edad y lejos de pantallas móviles, así como limitar el acceso a redes sociales y material que pudiera afectar su desarrollo.
En tanto justificó que su iniciativa no significa la pérdida de comunicación entre las alumnas y los alumnos con las madres y padres de familia, ya que las autoridades educativas deberán garantizar canales abiertos de comunicación durante toda la jornada escolar.
Con ello se pondera el interés superior de la niñez al proteger el derecho de las niñas y niños a una educación libre de distracciones y riesgos.
Del mismo modo señala que, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), el uso desmedido de dispositivos móviles dentro del aula impacta negativamente en los procesos de aprendizaje, al reducir la capacidad de atención, afectar el desempeño académico y disminuir hasta en un 20 por ciento la retención de los contenidos, además de generar distracciones permanentes.
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Asimismo, subrayó que el empleo inadecuado de teléfonos celulares está vinculado con afectaciones al bienestar socioemocional de las y los estudiantes, tales como la pérdida de la convivencia presencial, la sobrecarga de información, la exposición a materiales no aptos y el aumento de prácticas como el ciberacoso y el acoso digital.
Advierte que incluso tener el dispositivo a la vista puede interferir en la concentración del alumnado, motivo por el cual distintas naciones han implementado políticas restrictivas con el objetivo de salvaguardar a la niñez y propiciar ambientes escolares más seguros.
En este contexto, consideró indispensable que el uso de teléfonos celulares con acceso a internet por parte de menores de edad se realice bajo criterios de supervisión y acompañamiento, por lo que plantea reformar y adicionar los artículos 9, 84 y 113 de la Ley General de Educación.
Cabe señalar que la iniciativa ya fue turnada para su análisis a la Comisión de Educación.