El diputado Jesús Fernando García Hernández del PT, propuso una iniciativa para asegurar la deducción del Impuesto Sobre la Renta (ISR) de los pagos realizados por los trabajadores del Sistema Educativo Nacional en concepto de peajes, compra de combustible o traslado en autobús hacia sus lugares de trabajo.
La propuesta, que agrega una fracción IX al artículo 151 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta, tiene como objetivo permitir la deducción de “los pagos efectuados por las y los trabajadores del Sistema Educativo Nacional, por concepto de traslado en autobús a sus centros de trabajo, por la compra de combustible para el uso de sus automóviles en el traslado a sus centros de trabajo, por peaje para el traslado a sus centros de trabajo, por reparación y servicios de automóviles usados para el traslado a sus centros de trabajo y por la adquisición de materiales para la realización de sus funciones”.
El documento señala que el Sistema Educativo Nacional comprende tres niveles, atendiendo a una población de 29.7 millones de estudiantes en los niveles básico y medio superior, y 4.7 millones en el nivel superior, y que la mayoría del personal docente y administrativo de estos niveles trabaja jornadas que superan la media laboral.
La iniciativa reconoce el compromiso de los trabajadores de la educación con sus responsabilidades institucionales, a pesar de tener que invertir parte de sus salarios en el cumplimiento de sus funciones, incluyendo docencia y otras tareas asignadas.
El legislador destacó que muchos trabajadores del sector educativo gastan al menos 250 pesos diarios en transporte desde sus hogares hasta sus lugares de trabajo, lo que sin duda afecta sus ingresos y poder adquisitivo.
Detalló que para aquellos que utilizan su automóvil personal, los gastos diarios pueden llegar hasta los 500 pesos, incluyendo combustible, servicios y peajes, además de los costos asociados con la adquisición de materiales para su trabajo.
Del mismo modo subrayó que estas limitaciones financieras afectan la capacidad de los trabajadores de cubrir las necesidades básicas de sus familias, lo que puede provocar estrés y otras enfermedades emocionales que impactan en su desempeño laboral y en el aprendizaje de los estudiantes.
Ante esta situación, el legislados propuso que los trabajadores del sector educativo sean incluidos entre los sujetos beneficiarios de la deducibilidad de gastos, dada la importancia que el sector público otorga a la actividad educativa y su trascendencia en la sociedad.
La iniciativa que ya remitida a la Comisión de Hacienda y Crédito Público, puntualiza que es injusto que las personas físicas asalariadas no puedan deducir los gastos relacionados con su trabajo, mientras que a las personas morales, especialmente a las empresas, se les permite deducir todo tipo de gastos necesarios para su funcionamiento y prestación de servicios.
Puntualizó que esta inequidad afecta particularmente al magisterio nacional, cuya función es fundamental para el desarrollo sociocultural de México.
