Lo cierto es que la negociación única magisterial entre la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) es, un auténtico bálsamo financiero para los Gobernadores de los Estados.
El dilema: si en dicha negociación nacional, los maestros verdaderamente conservarán todas sus conquistas sindicales adquiridas en cada una de las entidades del País.
¡Hay que ver!