Exigen Diputados garantías para aprobar reforma educativa.

Los coordinadores de los grupos parlamentarios del PAN, PRI, MC y PRD, así como dos vicepresidentes de la Mesa Directiva, exigieron a los gobiernos ...
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Los coordinadores de los grupos parlamentarios del PAN, PRI, MC y PRD, así como dos vicepresidentes de la Mesa Directiva, exigieron a los gobiernos federal y de la Ciudad de México garantizar las condiciones para que la Cámara de Diputados pueda restablecer sus trabajos legislativos.

Y es que acusaron que los bloqueos de los accesos al Palacio Legislativo de San Lázaro, por parte de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), está generando una «parálisis legislativa».

Se trata de la tercera vez que bloquean el recinto legislativo, con lo cual se suspenden temas pendientes por desahogar.

Fue el Coordinador de los Diputados panistas, Juan Carlos Romero Hicks, quien llamó al gobierno federal y capitalino que garanticen las condiciones necesarias para que funcione la Cámara de Diputados, pues advirtió que los bloqueos de la CNTE están llevando la situación al límite de un Estado fallido.

«Siempre hemos estado abiertos al diálogo con propuestas, pero no con agresión; no vamos a permitir que las instituciones se encuentren paralizadas».

«Vivimos en una situación muy lamentable, estamos en el límite de un Estado fallido y consideramos que el chantaje al Presidente de la República y al Congreso de la Unión no es una conducta válida».

Por su parte René Juárez Cisneros, Coordinador de los Diputados del PRI, acusó que tanto el gobierno federal como de la Ciudad de México, no están cumpliendo con su responsabilidad para que funciones el Congreso.

“(Que el gobierno) dialogue, que haga política, que sea eficiente, que establezcan acuerdos, y que después nos permitan entrar a la Cámara a los Diputados. Nosotros estamos cumpliendo con nuestra responsabilidad, ellos no».

Agregó que “no solamente es el dictamen del tema educativo, hay muchos temas que están detenidos, necesitamos que se normalice, pero no nos toca a nosotros, le toca al gobierno, y hoy no está cumpliendo».

En tanto que el coordinador de MC, Tonatiuh Bravo Padilla, criticó a la CNTE por pretender chantajear al Gobierno si el dictamen de reforma educativa no contiene lo que ellos quieren.

Indicó que los diputados respetan el derecho a la manifestación y la libertad de expresión de cualquier grupo inconforme. «No queremos intervención, ni que mengüen esos derechos, pero concomitante a esos derechos, están los de los legisladores, quienes debemos cumplir nuestra labor”.

Asimismo la coordinadora del PRD, Verónica Juárez Piña, enfatizó sobre le secuestro de la CNTE al palacio legislativo y, al igual que sus compañeros Diputados, pidió garantías al Gobierno federal y capitalino para que se reanuden los trabajos.

«Por tercera vez vuelve a ser secuestrada la Cámara de Diputados, por eso hacemos ese llamado al gobierno y a que también garantice el derecho a la libre manifestación».

El diputado Marco Antonio Adame Castillo (PAN), vicepresidente de la Mesa Directiva, dijo que es «inaceptable que prevalezca la presión, el chantaje y el bloqueo sobre las instituciones y sobre un poder del Estado mexicano».

Por ello, sostuvo que las autoridades tanto de la Cámara como de los gobiernos federal y capitalino deben asumir su responsabilidad y garantizar la inviolabilidad del recinto y el ejercicio del trabajo legislativo.

«Es indispensable que, en uso de sus facultades, el presidente de la Mesa Directiva brinde todas las condiciones para el funcionamiento de la Cámara», expresó.

Por último, la vicepresidenta de la Mesa Directiva, Dulce María Sauri Riancho (PRI), dijo que su bancada estaba lista para desahogar la agenda legislativa de «amplio espectro» para este martes, donde no figuraba el dictamen relativo a la reforma educativa.

Comentó que aproximadamente a las 8:30 horas «inexplicablemente» se retiró el operativo de la policía de la Ciudad de México que permitía facilitar los accesos a la Cámara de Diputados, lo cual coincidió con la instalación de una serie de casas de campañas en las ocho entradas del recinto legislativo.

«Hubo una perfecta sincronización entre la llegada de estas casas y el retiro de la fuerza pública», afirmó.