Ante la pérdida acelerada de aprendizajes en las y los estudiantes que no regresaron a la escuela y que siguen su educación a través de la televisión; la organización civil Mexicanos Primero planteó que los estudiantes permanezcan en una escuela segura al menos cinco horas diarias durante cinco días a la semana.
Durante la conferencia de prensa ‘Regresemos para Aprender’, el organismo presentó evidencia de que las niñas, niños y adolescentes (NNA) que no asisten a las escuelas no sólo no aprenden, sino que están retrocediendo.
Según el Presidente Ejecutivo de Mexicanos Primero, David Calderón, los datos presentados demuestran que a los alumnos de educación básica la oferta a distancia no les gusta, no cuentan con dispositivos para seguirla, y sobre todo no les funciona para aprender.
Por lo anterior, el activista advirtió que la opción de aprendizaje en México es mantener la escuela abierta y restringir los riesgos para ofrecer confianza a estudiantes y familias.
“Ha quedado demostrado que la presencialidad es insustituible. Todas y todos en el país tenemos que impulsar el regreso total. Ello no significa desconocer, y menos dejar al azar la seguridad en las escuelas; exactamente al contrario: porque valoramos tanto, fundados en la realidad, lo que se aprende con la escuela en plena actividad, exigimos y hasta litigamos que haya condiciones, protocolos y suministros. Que no los haya, que se simule, que se desdeñe o se deje al poder de compra de las familias o a los magros ingresos de las y los maestros es una grave injusticia que nos debe indignar y ser denunciada sistemáticamente. Regresemos para aprender, no por completar el powerpoint de la Secretaria o el Presidente en la conferencia matutina”, expresó.
De acuerdo con datos presentados por Katia Carranza, investigadora de la organización, las y los estudiantes de la muestra que continúan sin asistir a la escuela no sólo no aprendieron, sino que perdieron conocimientos con respecto a los resultados que obtuvieron en abril pasado en lectura y matemáticas.
“Los resultados correspondientes al área de lectura nos muestran que quienes se encuentran todavía a distancia no sólo no están aprendiendo, sino que están perdiendo conocimientos; un 8.3% de NNA que en abril lograron comprender un texto de 4° grado, en diciembre ya no pudieron hacerlo. Es más significativa la pérdida de aprendizaje en aquellos que ya no volvieron a la escuela, puesto que en abril el 64% pudo comprender un texto de 3er grado y en diciembre sólo lo hizo el 41%, es decir, disminuyeron en un 23%”, afirmó.
Respecto a matemáticas, la investigadora señaló que la situación es más compleja, ya que los resultados muestran que se requiere una presencia más sistemática en la escuela para consolidar los aprendizajes.
“NNA en modelo hibrido empeoraron en 8.3%… De los que siguen a distancia, la pérdida de aprendizaje fue de 6.2%, y de quienes no regresaron a la escuela, casi 1 de cada 10 estudiantes de 10 a 15 años no puede nombrar un número de dos dígitos”.
Del mismo modo expresó que asistir a la escuela, inclusive un solo día a la semana, hace la diferencia, ya que quienes asisten un día a la semana mejoraron en 18.5% la comprensión de un texto de 3º de primaria; en abril lo pudo hacer el 53.7% y en diciembre, después de volver unos meses a la escuela, el 72.2%.
En tanto que en matemáticas, las NNA que asistieron a la escuela de manera sistemática, mejoraron en 10.7% al resolver una división. En abril, lo logró el 16.7% y en diciembre el 27.4%.
Por su parte, Laura Ramírez, Directora de Activación, dijo que cuando hablamos de aprendizaje, no nos referimos a acumular conocimientos, sino a desarrollar todas las habilidades necesarias para tener una vida plena.
“El aprendizaje es un derecho porque nos permite ser la mejor versión de nosotros, de nosotras mismas; porque es fundamental para desplegar nuestras capacidades cerebrales y para ser ciudadanos democráticos, para relacionarnos mejor con otras personas y con el planeta y contar con herramientas socioemocionales óptimas para nuestro crecimiento, y para vivir en sociedad”, detalló.
En ese sentido, Calderón planteó que para que el aprendizaje continúe y se recupere lo perdido, cada estudiante debe contar con 5 x 5 x 5; es decir exigir cinco horas de escuela, cinco días a la semana, y cinco condiciones imprescindibles en cada escuela que deben garantizar las autoridades educativas:
1) Agua (y jabón, y sanitizantes).
2) Aire, lo que implica ventilación, distancia y cubrebocas.
3) Apoyo socioemocional, con el juego y convivencia que hace falta.
4) Refuerzo en los aprendizajes fundamentales en donde se ha diagnosticado retrocesos.
5) Participación, lo que incluye escuchar a la comunidad todo el tiempo, para que las soluciones sean solidarias y sustentables, y la exigencia a la autoridad sea constante.
Afirmó que el regreso a las aulas escolares debe ser para aprender, y no sólo con la cantaleta de “regresen, regresen”, sin dar confianza en los hechos, y sin un propósito, lo cual dijo, es estéril.
Por último dijo que si se que todas las familias capten que el aprendizaje es algo vivo, y que no se queda detenido con el marcador en ceros, sino que decrece y que es necesario un plan de recuperación vigoroso, entonces hay esperanza.
“Cinco dias de cinco horas con cinco condiciones; 5 x 5 x 5 es una forma sencilla pero sólida de plantear a qué tienen derecho las NNA. La escuela si es el espacio en el que debieran estar esta mañana; en muchos sentidos es el espacio más seguro y adecuado para su desarrollo integral, con sus pares, con una maestra que les conoce, no con experto en televisión que nunca les conocerá, nunca hará ajustes y nunca responderá preguntas o variará el ritmo o el camino de su exposición. Es el espacio más adecuado en general, y si no lo es, ello se debe a la corrupción y la ineptitud”, puntualizó..