Y en el mes donde inexplicablemente surgen de las penumbras caudales de mexicanos y más mexicanos dispuestos a celebrar las fiestas patrias; es preciso reflexionar sobre la situación política del País:
Es la escena de un Presidente que deambula cabizbajo, con sus niveles de aprobación ciudadana en los talones y que hace todo lo humanamente posible por resurgir en el segundo tramo de su Gobierno.
Y es que luego de ser calificado como el gran reformador, o mejor dicho el “salvador de México”, el Presidente Peña Nieto no pierde tiempo de cara al 2018 porque entiende el adverso momento político de su Gobierno.
En ese sentido se pueden entender los ajustes en diversas posiciones de su gabinete presidencial, entre ellas, la Secretaría de Educación Pública (SEP), que aún con el manotazo a la CNTE, sigue siendo un polvorín.
La llegada de Aurelio Nuño Mayer ha sido para muchos; un agrado.
Ahí está el poderoso grupo que encabeza Claudio X. González; Mexicanos Primero, que celebró el arribo a la SEP de quien es considerado la mano que meció la cuna en la gestación de la reforma educativa (y se sabe lo que significa el visto bueno de Mexicanos Primero en la educación del País).
Aurelio Nuño tiene la no fácil tarea de continuar lo que dejó incompleto Emilio Chuayffet (personaje ultimado políticamente cuando desde Los Pinos fue obligado a suspender indefinidamente las evaluaciones docentes para salvaguarda del proceso electoral de 2015).
Su llegada a la SEP, más por la cercanía con el Presidente que por su currículo, es interpretado como una sólida apuesta del titular del Ejecutivo para un sexenio más en los Pinos de los tricolores.
Porque aunque Aurelio Nuño asegure una y otra vez que no tiene más futuro que la SEP, lo cierto es que tendrá todos los reflectores para construir su candidatura presidencial 2018, que mucho dependerá de su habilidad para implementar la reforma educativa.
En esa difícil tarea, el titular de la SEP podría permear positivamente en la percepción ciudadana que tiene en la educación pública un valor agregado.
Así también serenar el ánimo magisterial, pues ya tendió la mano a los maestros y les ofreció diálogo y cercanía.
Sin embargo, no deja de ser curioso que uno de sus primeros actos públicos haya sido en el Coloquio Internacional para la Educación Pública, organizado por el Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE).
En ese acto público del Secretario Nuño hay un claro mensaje: fortalecer el control político de la élite institucional que dirige Juan Díaz de la Torre, pues el régimen tiene clara lectura de lo que significa el SNTE en los procesos electorales.
Así el contexto político patriotas. La carrera presidencial 2018 traza su ruta y Aurelio Nuño Mayer desde la SEP, sin duda; una apuesta del Presidente.