El dirigente del Partido Acción Nacional, Marko Cortés Mendoza, aseguró que en pleno auge de la tercera ola del Covid-19 y a solo 15 días del regreso de las niñas y los niños a las clases presenciales, una vez más el gobierno de la 4T confirma que su principal estilo para manejar los asuntos nacionales son la improvisación y las ocurrencias.
El dirigente blanquiazul advirtió que el decálogo emitido por la Secretaría de Educación Pública (SEP) para el regreso “seguro” a las aulas carece de solidez en aspectos sanitarios, administrativos y académicos.
Criticó que el gobierno morenista tuvo varios meses para planear y preparar las condiciones adecuadas para que los más de 25 millones de niñas y niños pudieran regresar a clases presenciales sin mayor riesgo para ellos, sus familias y maestros, pero no lo hicieron, y faltando dos semanas para el inicio del ciclo escolar 2021-2022, se reabrirán las escuelas sin mayor preparación.
“El regreso a las aulas no es lo que está a debate, sino las condiciones en las que se regresa, las formas y los tiempos. En Acción Nacional pensamos que es importante el regreso a las escuelas porque es fundamental el apoyo de las y los maestros para resolver las dudas de los estudiantes, pero sobre todo para la interacción social de los mismos. Sin embargo, denunció, el proceso de vacunación sigue estando muy retrasado, el estado físico de las escuelas y las medidas sanitarias no son las adecuadas”, afirmó Cortés Mendoza.
Dijo que contrario a México, en otros países ya se la vacunó a niños y adolescentes mayores de 12 años para protegerlos del contagio de COVID-19.
En tanto a las maestras y maestros, personal administrativo, de limpieza y seguridad de las escuelas, no se les ha aplicado las dos dosis de la vacuna, sin embargo y pese a los anterior, el gobierno federal se apresuró a convocar a los padres de familia para que reparen las escuelas (pintura, puertas, baños, agua, luz, pizarrones, pupitres, entre otros rubros), sin informar cómo se resolverá la complejidad que implica el retorno a las aulas, es decir, cuántos alumnos habrá en cada salón, qué porcentaje seguirá tomando clases vía remota, horarios y turnos, si habrá métodos híbridos o combinados y qué sistemas de evaluación se van aplicar.
Asimismo dijo que es más sorprendente que el gobierno federal y la SEP no precisen los dos objetivos principales del regreso a clases: cuál será el proceso de enseñanza-aprendizaje que permita recuperar el tiempo perdido durante la pandemia y cuál será el tan necesario proceso de convivencia (durante la tercera ola de COVID) entre los estudiantes.
“Por eso nosotros decimos que, para el regreso a las clases presenciales, el gobierno está siguiendo los mismos pasos que dio con el mal manejo de la pandemia, la seguridad y la economía, es decir, sin estrategia, diagnósticos y planificación, sino puras ocurrencias e improvisaciones”, expresó.
Del mismo modo lamentó que el gobierno no sepa responder a los retos educativos en tiempo de la pandemia, ya que su apuesta por las clases impartidas por televisión evidenció que al final del ciclo escolar pasado solo una minoría de los estudiantes tomaban sus estudios en casa mediante esta modalidad y miles de ellos, de plano, desertaron de la escuela.
El panita afirmó que el PAN está a favor del regreso a clases presenciales, pero que está en contra de que se realice de manera negligente, sin las condiciones óptimas y sin la planificación adecuada entre las autoridades educativas, los maestros y padres de familia.
Y es que advirtió que se debe evitar por todos los medios que se siga propagando el Covid-19 que tantas vidas ha costado al País.
En ese sentido agregó que no se vale que se siga al pie de la letra el dicho del Presidente “no me importa que la mayoría esté pensando en no regresar”, cuando su gobierno no hizo el trabajo que debía hacer para el regreso digno y seguro de las niñas y niños a sus clases.
Puntualizó que la sociedad claramente tiene opiniones encontradas, ya que de acuerdo con la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) que realizó una encuesta, el 38.6 por ciento de los padres de familia consultados se pronunció por iniciar el nuevo ciclo escolar a distancia, 35.3 por ciento a favor del regreso a clases presenciales, y 26.1 por ciento opinó que es mejor un sistema híbrido.
Afirmó que el mismo estudio reportó que el 46.2 por ciento de los padres de familia se mostró preocupado por el posible contagio de Covid-19 a sus hijos mediante las clases presenciales.