La nueva reforma educativa: del plagio a la soberbia.

“Salir de Guatemala para entrar a Guatepeor”, es un dicho muy popular entre los mexicanos y que éstos emplean o empleamos, para referirnos a ciertas ...
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“Salir de Guatemala para entrar a Guatepeor”, es un dicho muy popular entre los mexicanos y que éstos emplean o empleamos, para referirnos a ciertas situaciones de la vida cotidiana que significan, en términos sencillos: salir de una situación mala para meterse en otra peor. Y eso es precisamente lo que en estos momentos se está viviendo en la selección de candidatos para integrar el Organismo para la Mejora Continua de la Educación; organismo que sustituiría al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE).

Como sabemos, tal Organismo se desprende de la Reforma de la Reforma Educativa que propuso el Gobierno que encabeza el Presidente López Obrador y que, semanas atrás, las Cámaras de Representantes aprobaron para que, con ello, se enterrara la “mal llamada” reforma educativa de Peña Nieto y compañía. De ahí entonces que, como parte de ese proceso para darle forma y vida a la Reforma recién aprobada, la Junta de Coordinación Política del Senado de la República, emitió una Convocatoria (http://comisiones.senado.gob.mx/educacion/docs/Acuerdo_JCP_JDDO.pdf), para que los interesados pudieran participar en el proceso de selección que los llevaría a integrar la Junta Directiva y/o el Consejo Técnico de ese nuevo Organismo.

Independientemente de los requisitos que se estipularon en dicha Convocatoria, y que no me detendré a analizar en estos momentos, más por falta de espacio que de ganas, el portal de Educación Futura. Periodismo de Interés Público, el pasado 5 de junio, denunció ciertas irregularidades en el proceso de selección de candidatos, tales como: el plagio y el incumplimiento de los requisitos de ciertos candidatos (http://www.educacionfutura.org/plagio-e-incumplimiento-de-requisitos-en-candidatos/?fbclid=IwAR1BIW1s059-nGXgJoRGSMcu6FcMplDza330dvgKyNiahZ8XGD2vKTU8rp0).

Gravísima situación fue ésta, pero lo que me pare mucho más grave, fue la soberbia con la que algunos Senadores tomaron esas irregularidades, puesto como puede leerse en el mismo portal de noticias (http://www.educacionfutura.org/evidencia-de-plagio-e-irregularidades-en-candidatos-se-analizaran-pero-no-frena-proceso-para-integrar-nuevo-organismo-educativo-senador-ruben-rocha/?fbclid=IwAR3z1rIu32YAty33Y5byIA9LjMHX8Y_PxQNJqnXfHgEZ8Ekq4ghXw39Pbqs), el Senador Rocha, Presidente de la Comisión de Educación en el Senado (http://www.senado.gob.mx/64/senador/1181), se deslindó del referido proceso de selección y le atribuyó una responsabilidad directa a la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) y la Comisión de Educación del Senado, celebrando el que se hayan denunciado estas irregularidades puesto que a partir de éstas, se realizaría un análisis más riguroso de las propuestas y se verificaría con mucho cuidado la información publicada, pues un caso de plagio o cualquier irregularidad, no tendría cabida en el nuevo Organismo.

Lo anterior, a muchos colegas de la pluma y letras, a investigadores, académicos, profesores y analistas políticos, nos llevó a preguntarnos si, dadas las evidencias aportadas por Educación Futura sobre las irregularidades señaladas, se repondría el proceso o de plano se cancelaría; sin embargo, menuda sorpresa nos hemos llevado pues este día (10 de junio), precisamente en el Senado de la República, inició la comparecencia de los candidatos (https://www.youtube.com/watch?v=3om8aE1AZEQ) a ocupar la Junta Directiva y/o el Consejo Técnico.

Ante estas situaciones, ¿qué tipo de mensaje se está mandando al pueblo de México?, ¿qué tipo de señales se están enviando a los que integramos el Sistema Educativo Mexicano (SEM)?

Preguntas sencillas si usted quiere, pero que tienen sentido si consideramos lo que en ese SEM acontece diariamente; le pongo un ejemplo: quienes nos dedicamos a la docencia le enseñamos a nuestros estudiantes, a comprender la importancia y el significado de la ética y los valores universales. Ese, es uno de los puntos medulares bajo los cuales la enseñanza y el aprendizaje cobra forma y encuentra sentido en las escuelas y en los salones de clase. En consecuencia, reconocer el trabajo de otro compañero, profesor, académico o investigador, se vuelve fundamental para generar algo que se llama conocimiento, puesto que está visto que nunca acabaremos de aprender y, consecuentemente, ese conocimiento, está en constante movimiento. Luego entonces, un principio básico que les enseñamos a nuestros estudiantes en la elaboración de sus trabajos, tiene que ver con el que no cometan ciertos “errores” al momento en que construyen éstos, por ejemplo, el que no tengan que citar una obra, un texto, una revista electrónica, etcétera; es decir, señalar la fuente de la que obtuvieron la información con el propósito, de dar el crédito al autor de tal o cual cuestión. Para ello, quienes nos encontramos en educación superior, explicamos la importancia del citado y el uso o empleo de manuales que tienen este objetivo, como el de la American Psychological Association (mejor conocido como APA) en su 6ª edición. De no hacerlo, estarían cometiendo plagio, en otras palabras: un delito. Así, sin más ni más: un delito. Y lo señalo enfáticamente porque, bajo ninguna circunstancia, se tiene que permitir tal cuestión si es que estamos hablando de un proceso formativo entre seres humanos que son perfectibles y no perfectos.

Y ya que hablamos de un proceso formativo a través del cual el ser humano aprende, ¿qué hubiera hecho el Senado de la República ante la denuncia mediante la cual fue evidenciado un delito? La respuesta es sencilla: reponer el proceso. Sin embargo, como “el hubiera” no existe y, al parecer, la soberbia inundó los pasillos de esa Cámara de Senadores, importó más la política que lo que tanto pregona el nuevo gobierno: una educación de excelencia o una excelencia en la educación. En fin.

Es claro que la política tiene secuestrada la educación en nuestro país. Gobiernos salen, gobiernos entran. Políticos se despiden, políticos entran, y otros se mantienen, pero lo que en días pasados aconteció, es una clara muestra de lo que he venido sosteniendo desde hace tiempo: en México padecemos de lo que otro dicho, que está bien dicho, señala: “es la misma burra no’más que revolcada”. Ni priistas, ni panistas, y ahora morenistas, han comprendido la importancia y magnitud del hoyo en el que se encuentra la educación en nuestro país, consecuencia obvia, de ese secuestro que refiero.

En este sentido, dudo mucho que se reponga el proceso de selección de candidatos. Espero, los que resulten seleccionados, trabajen arduamente para limpiar la gran mancha que ha dejado una candidata en un Organismo que aún no nace y ya tiene en sus espaldas el gran peso de la arbitrariedad y el desencanto.

Al tiempo.


Referencias:

Juárez, E. (5/06/2019). Plagio e incumplimiento de requisitos en candidatos para integrar Organismo para la Mejora Continua de la Educación. Educación Futura.

Recuperado de: http://www.educacionfutura.org/plagio-e-incumplimiento-de-requisitos-en-candidatos/?fbclid=IwAR1BIW1s059-nGXgJoRGSMcu6FcMplDza330dvgKyNiahZ8XGD2vKTU8rp0, http://comisiones.senado.gob.mx/educacion/docs/CTEOMCE/ACR.pdf, http://comisiones.senado.gob.mx/educacion/docs/JDOME/ACR.pdf, http://comisiones.senado.gob.mx/educacion/docs/JDOME/EBBB.pdf, http://comisiones.senado.gob.mx/educacion/docs/Acuerdo_JCP_JDDO.pdf, http://comisiones.senado.gob.mx/educacion/docs/Acuerdo_JCP_JDDO.pdf

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