Pese a que la «Austeridad Republicana» es una de las banderas del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, lo cierto es que persiste la práctica de entregar recursos públicos al Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE).
De acuerdo con La Jornada, la Secretaría de Educación Pública (SEP) acordó entregar al gremio magisterial que encabeza Alfonso Cepeda Salas, la cantidad de 200 millones de pesos para que el SNTE realice acciones de comunicación y difusión de la nueva escuela mexicana mediante la suscripción de un convenio.
Asimismo, el Sindicato recibirá 150 millones para fortalecer las prestaciones de previsión social, fomento cultural, capacitación y actualización del magisterio.
En la respuesta emitida por la dependencia federal al Pliego Nacional de Demandas 2019, presentado por el gremio magisterial en marzo pasado, se señala que quedarán abrogadas todas las afectaciones a los derechos laborales de los maestros que se generaron por la aplicación de la reforma educativa peñista.
Este año, el SNTE logró negociar un incremento global de 6.25 para docentes y directivos de nivel básico, además de un despegue salarial de la plaza inicial de subdirectores, directores, inspectores de zona e inspectores generales de sector, a fin de establecer un diferencial acorde con la responsabilidad del personal directivo y de supervisión
en prescolar, primaria y secundaria, entre otros beneficios económicos.
Del mismo modo, la SEP pactó con el organismo sindical, realizar las gestiones necesarias ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para analizar la viabilidad de la aplicación del retiro voluntario; acordó que dará atención prioritaria a las solicitudes de cambio de escuela para los docentes que enfrenten condiciones de violencia e inseguridad.
Además la SEP acordó con el SNTE el respeto a las plazas, ascensos e incentivos económicos alcanzados por los trabajadores de la educación mediante los procesos de ingreso, promoción y permanencia que estableció la pasada reforma educativa.
