¿Basta con solo reformar la Educación Básica?

Por:  José Antonio Martínez Gutiérrez. Reflexionando sobre las aspiraciones educativas que el ciudadano  promedio tiene en base a la oferta que el ...

Por:  José Antonio Martínez Gutiérrez.

Reflexionando sobre las aspiraciones educativas que el ciudadano  promedio tiene en base a la oferta que el Sistema Educativo Nacional le ha preparado para su formación,  se debe   reconocer  que el asunto no es muy alentador que digamos.   

En la Búsqueda de alternativas que mitiguen  los tantos males que padece la educación mexicana, la SEP y el SNTE en el marco de la Alianza por la Calidad de la Educación propusieron  Reformar la Educación Básica, por ello, desde hace algunos ayeres  a la fecha,  el grueso espectro magisterial  se encuentra en proceso de alternancia para apropiarse del modelo educativo que propone la Reforma Integral de la Educación Básica (RIEB).    Sin embargo, ¿es reformando la educación básica la alternativa para mejorar la educación mexicana?,  sin duda que si era muy importante hacerlo -era urgente por decir lo menos- , pero esto al mismo tiempo representa  muy poco frente a  las tanta necesidades  que en materia educativa padece nuestro País.   

Fernando Savater en  la conferencia magistral que ofreciera durante la apertura de los trabajos del Congreso Nacional de Educación organizado por el SNTE afirmó que:  la educación debe luchar contra la fatalidad social,  afirmación que es muy del todo acertada –y con la cual estoy de acuerdo-;   pero si se toma como referencia  el contexto de  la sociedad mexicana,   la educación no solo no  lucha  contra  esas  fatalidades, sino que en si misma se puede  considerar  como una  fatalidad.     Por ejemplo,  el infante mexicano que inicia su vida educativa no tiene al final de  cuentas  garantizado el cobijo de su sistema educativo más allá de lo que por obligación constitucional le provee, es decir:   la Educación Básica.     Si con esfuerzo y  suerte  termina su educación secundaria comenzará a experimentar el efecto del embudo,  ahí  donde las oportunidades de continuar su formación educativa  se hacen  más estrechas.     Si consideramos que logra estudiar su educación media superior, llegará entonces  a la titánica búsqueda del espacio universitario donde no sólo debe enfrentar la minúscula oferta educativa  vs  la mayúscula demanda estudiantil,  sino  también a la desgracia nacional de la corrupción de  rectores, políticos,  «suciedades» de alumnos y gobiernos  que se regodean muy campantes entre las delicias del poder condicionando económicamente los espacios  de las facultades  saturadas de  algunas universidades del País,  y pongo como fiel ejemplo a la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT) que según testimonios de muchos  jóvenes rechazados,  para la facultad de medicina se necesita algo así como unos  $ 40, 000 para asegurar  ingreso.       Los casos  lector-lectora, de  jóvenes  que no son aceptados  porque  las universidades públicas no pueden arroparlos son tan comunes  que en verdad no alcanzo a comprender cómo hemos permitido  la subsistencia de  éste modelo educativo.    Que acertada entonces la afirmación de que México es  fábrica eficiente  de ninis en un contexto paradójico de su  población mayoritariamente joven y  que en cuyos hombros se están las esperanzas de crecimiento nacional.       Aquí  es donde cabe  sopesar  si vale la pena reformar la  educación básica en un País que no es capaz de cobijar a sus ciudadanos dentro de su sistema educativo de principio a fin.

Cierto es que las erogaciones económicas que el País destina al sector educativo son considerables, -cuantiosas por decir lo menos- sin son comparadas con otros sectores, sin embargo,  también es cierto que las tales erogaciones son  al final de cuentas un gasto y no en si la inversión educativa esperada.   Para muestra certificada basta el programa ENCICLOMEDIA  del Gobierno  Foxista  y que  apoya  lo que sostengo:   Gastar y no invertir.     Hoy del programa ENCICLOMEDIA dan cabal testimonio muchas escuelas que aún conservan los equipos  en total abandono, sin mantenimiento, sin internet, vaya… sin uso alguno, y todo  al amparo de recursos  que fueron entregados para “educar”.    Ojalá espero, el programa Habilidades Digitales para todos,  que en teoría busca reemplazar al moribundo ENCICLOMEDIA  no corra la misma suerte.   

Y ya en la despedida y completando en algo más la fatalidad educativa mexicana y comprender por qué no basta con solo  reformar la Educación básica,  lo que no podía faltar.      La capacidad operativa de la Mtra.  Elba Esther Gordillo Morales que navega a sus anchas sobre las tranquilas aguas de la impunidad y,  peor aún: con la olímpica  complicidad  del mismísimo Presidente  Calderón –su socio en 2006-.   ¡Pero es aquí donde me  quedo bastante muy enchilado y sin palabras!    Lo dejo mejor para la prudencia de sus sensatos razonamientos.   Adios.